Charles R. Goulding and Andressa Bonafe tienen una conversación interesante con Mauricio Toro, cofundador y director ejecutivo de TECHFIT.
La combinación de la planificación digital e impresión 3D promete mejorar considerablemente los resultados de las cirugías para los pacientes y, al mismo tiempo, hacer que sean más rápidas y rentables. Tuvimos una conversación con el cofundador y director ejecutivo de TECHFIT, Mauricio Toro, en la que nos dio una descripción general del trabajo de su empresa junto con sus puntos de vista sobre los desafíos y oportunidades de la impresión 3D en la medicina.
Para comenzar, ¿podría contarnos un poco sobre usted y las experiencias educativas y profesionales que finalmente lo llevaron a cofundar TECHFIT?
Empecé como ingeniero de automovilismo. Mi experiencia es en realidad como aerodinámico para autos de carreras. Trabajé con el equipo de Fórmula Tres en el Reino Unido. Un amigo de la familia, que es mi cofundador en TECHFIT, es médico y me introdujo al campo de la medicina. Él me invitó a participar de una empresa de dispositivos médicos y, a partir de ahí, orienté mi carrera hacia esta industria. Cuando entré en el campo de la ortopedia, no pude evitar compararlo con la industria automotriz. Los autos de carreras son una pasión y un pináculo de la innovación automotriz, pero no son tan críticos para la humanidad como la salud. Aun así, estábamos realizando simulaciones en 3D de los coches e imprimiendo modelos en 3D para los túneles de viento. Lo que encontré fue que este no era el caso en el campo de la ortopedia, que es muy conservador. En la mayoría de los casos, los médicos entraban a la cirugía con diez tamaños diferentes de implantes y, como si estuvieran en una zapatería, medían qué implante encajaría mejor (con el paciente abierto). Así que me quedó claro que ahora tenemos la tecnología para mejorar esto. Y así empezó toda la idea de TECHFIT.
¿Podría darnos una descripción general de su empresa y sus productos? Estamos especialmente interesados en conocer el rol de la impresión 3D en sus ofertas.
En TECHFIT hemos desarrollado una plataforma integral para la creación de dispositivos médicos personalizados para aplicaciones ortopédicas, como reconstrucción ósea y musculoesquelética, neurocirugía y cirugía craneomaxilofacial y torácica. Hemos creado un software basado en la nube en el que los médicos pueden cargar una tomografía computarizada y convertirla en un modelo 3D del paciente. Este modelo se puede utilizar para cirugías virtuales y colaboración con otros médicos de todo el mundo para encontrar el mejor plan de tratamiento. Tenemos técnicos quirúrgicos e ingenieros disponibles para ayudar y asegurar que todo lo que se diseñe sea fabricable. Entonces, en otras palabras, creamos un entorno basado en la nube donde se puede diseñar y dar seguimiento a un caso.
Una vez que se realiza el diseño, procedemos a imprimir modelos anatómicos, guías quirúrgicas e incluso dispositivos implantables, utilizando nuestros recursos de impresión 3D registrados por la FDA o los equipos del cliente. En este contexto, si un hospital planea implementar la planificación quirúrgica 3D y los procesos de impresión 3D, podemos ayudarlo a través de nuestra asociación con Formlabs. Hemos validado por completo el equipo de impresión de Formlabs, por lo que podemos asegurarnos de que los procesos cumplan con los estándares médicos. Nos encargamos de todo el mantenimiento preventivo, validación y control de calidad.
En su punto de vista, ¿cuáles son las áreas de aplicación más comunes para la planificación digital de la cirugía hasta el momento y cuáles serían algunas prometedoras para el futuro?
Por ahora, diría que el área más grande, la de adopción temprana, ha sido la cirugía craneomasculofacial. Esto se debe básicamente a que el rostro es lo que mostramos al mundo. Por lo tanto, es muy importante que la reconstrucción sea exacta y precisa. Creo que lo que viene a continuación y está comenzando a tener mucha tracción es la cirugía de reemplazo de articulaciones, que incluye reemplazo de hombro, tobillo, rodilla y cadera. Pero para el futuro, lo que vemos que es más interesante es que, con un buen software e impresoras 3D en el punto de atención, podemos comenzar a atender casos de trauma. Entonces, por ejemplo, imagine un paciente que ha tenido un accidente automovilístico y tiene un hueso roto en muchos fragmentos. Podemos utilizar la impresión 3D de respuesta rápida para acelerar la recuperación de este paciente y garantizar que la movilidad sea mejor que si hubiéramos utilizado métodos tradicionales.
En una nota más general, ¿cómo ve el papel de la impresión 3D en el futuro de la medicina?
Yo creo que la aplicación de la impresión 3D en medicina es un proceso y que ese proceso tendrá cuatro etapas. La primera y más elemental etapa es la impresión de modelos anatómicos para entender la anatomía y con fines de educación médica. Creo que este papel se ha cumplido bastante. Podemos mejorar la calidad de los modelos, pero esta es la base sobre la que se construye todo. El siguiente paso, la segunda ola por así decirlo, es la impresión 3D de dispositivos médicos. Este tipo de aplicación está ganando terreno debido a todos los desafíos de la cadena de suministro que vimos debido al COVID-19 y la complejidad asociada con la fabricación de algunos de los dispositivos que usamos. El siguiente paso es la impresión 3D de sustancias bioactivas, incluidos los andamios. Hay numerosas startups con proyectos muy interesantes, como la impresión 3D de fosfato tricálcico para andamios específicos para pacientes. Finalmente, el último paso, que es el objetivo de todos nosotros, es imprimir tejido en 3D.
¿Y cuáles diría que son actualmente los desafíos más comunes para los profesionales de la salud para incorporar la impresión 3D y cómo superarlos?
Creo que hay básicamente tres desafíos y todos están entrelazados. El primero es económico: es necesario invertir en una impresora 3D, invertir en talento, etc. Este aspecto se discute a menudo y, sin duda, hay muchos obstáculos que superar. Creo, sin embargo, que hay otras cosas escondidas detrás. Más que simplemente financiero, es un problema de talento. No hay mucho conocimiento sobre cómo usar la impresión 3D en un entorno médico. Por lo tanto, ingresar a la impresión 3D médica significa que tiene que invertir en una curva de aprendizaje para alguien. Creo que esta es una de las mayores barreras. Otro es el reembolso. Si no hay un marco de trabajo de buena calidad o talento de buena calidad, las aseguradoras cuestionarán el valor de la impresión 3D y no la pagarán. Así que creo que debemos trabajar para que sea más rentable, lo que significa reducir los costos de hardware y el costo de aprender como organización. Necesitamos encontrar formas creativas de construir alrededor de los costos de implementación y, una vez que haya una adopción más generalizada, será más fácil demostrar el valor de la impresión 3D y lograr que las aseguradoras la reembolsen.
Volviendo a TECHFIT y sus aplicaciones de impresión 3D, ¿hay algún otro desarrollo reciente que valga la pena mencionar?
Sí, hay dos hechos importantes que han ocurrido recientemente. Primero, nuestro software recibió la aprobación de la FDA. Esto es muy importante porque demuestra que podemos hacer todo con un estándar médico, no como un pasatiempo de impresión 3D, sino como una impresión 3D de grado médico, que es lo que merecen los pacientes. Y, en segundo lugar, hemos estado trabajando con la Mayo Clinic y uno de sus cirujanos torácicos en Jacksonville, el Dr. Matthew Thomas, para crear nuevos reemplazos de tórax impresos en 3D. Esto beneficiaría a los pacientes que tienen infecciones por cirugía a corazón abierto o tumores en las costillas. Acabamos de recibir una patente para esternones impresos en 3D hechos de biomaterial PEEK. Así que estamos muy entusiasmados con eso.
Conclusión
Quedamos impresionados con la combinación de conocimiento técnico y comercial de Mauricio Toro y su amplia experiencia. Nos presentaron su trabajo cuando investigamos nuestro artículo sobre Formlabs recientemente publicado y examinamos uno de sus webinars. La experiencia técnica de Mauricio es evidente e incluye una patente emitida recientemente. Su perspicacia comercial es clara cuando enfatiza la importancia de desarrollar prácticas que permitan el reembolso de los costos de impresión 3D.